From left to right: Dr. Peggy Honein, State, Tribal, Local, and Territorial Support Task Force, CDC; Dr. Cindy Friedman, Division of Global Migration and Quarantine in 2020, CDC; Dr. Jennifer Layden, CDC; Dr. Kevin Chatham-Stevens, Medical Officer, CDC
La temporada de viajes en Estados Unidos inició con el feriado del Día del Trabajo, en medio de la propagación de la variante Delta, la más contagiosa en todas las olas de COVID. Las hospitalizaciones y las muertes siguen aumentando entre las personas no vacunadas.
Por: Jenny Manrique
A pesar de la advertencia hecha por los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) a los estadounidenses no vacunados de no viajar durante el feriado del Día del Trabajo, la movilidad del fin de semana disparó los contagios a números alarmantes.
Según datos de la Universidad Johns Hopkins, el promedio de siete días de casos nuevos el lunes fue un 300% más alto que el Día del Trabajo de 2020, lo que se tradujo en hospitales abarrotados y un aumento de las infecciones entre los niños.
Expertos de los CDC convocados por Ethnic Media Services advirtieron que si bien hemos experimentado varias olas durante la pandemia, la actual es “una oleada bastante grande”
relacionada con una serie de factores, incluida la variante Delta altamente transmisible.
“Esta pandemia continúa cobrando un precio muy alto”, dijo la Dra. Peggy Honein, quien lidera el grupo de apoyo estatal, tribal, local y territorial en la respuesta a COVID-19 de los CDC. “A pesar de la disponibilidad de medidas de mitigación probadas y vacunas muy efectivas, estamos viendo un aumento en los casos, en las visitas al departamento de emergencias, en las admisiones hospitalarias y en las muertes.”
En junio se reportaban menos de 12.000 casos por día en el promedio semanal, y en la actualidad ese número es de 150,000. El número promedio de nuevas admisiones hospitalarias ha aumentado a más de 12,000 y los CDC reportan casi 1,000 muertes diarias. En total, se han reportado casi 640,000 muertes y casi 40 millones de casos desde que comenzó la pandemia.
En este contexto, un poco menos del 53% de la población está vacunada, siendo los adultos mayores de 65 años los más cubiertos (82% se ha vacunado) y los jóvenes entre 12 y 17 años, los menos protegidos (solo 40% ha recibido las dos dosis).
“Estamos particularmente preocupados por los niños”, dijo Honein al referirse al aumento de hospitalizaciones entre esta población principalmente en estados con bajas tasas de vacunación.
“No hay una vacuna autorizada para niños menores de 12 años en este momento, pero todos podemos hacer nuestra parte para proteger a los niños vacunando a la mayor cantidad posible de personas que tengan 12 años o más, y utilizando otras estrategias de mitigación, como el uso de máscaras”.
La experta también mencionó la reapertura de las escuelas en cada vez más condados en todo el país, y en las cuales se pueden implementar “enfoques de prevención integrales”. Es decir el uso de varias medidas paralelamente: la promoción de la vacunación, el uso universal de máscaras, el distanciamiento físico, las pruebas de detección para identificar y aislar casos de manera rápida, y la mejora en la ventilación de las aulas.
“Se ha vuelto aún más claro durante el último año, lo importantes que son las escuelas no solo para la educación, sino para la salud mental y física de nuestros hijos, por lo que es fácil que ocurra la transmisión cuando bajamos la guardia”, añadió Honein.
Así mismo señaló que los cuidados se deben incrementar en lugares públicos cerrados donde podría haber hacinamiento y, en particular en los condados que tienen altos niveles de transmisión que se pueden consultar con esta herramienta de los CDC.
Vacunación masiva
Jennifer Layden, subdirectora de la Oficina de Ciencias de los CDC, explicó las últimas recomendaciones de los CDC respecto a las personas con sistemas inmunológicos moderados a gravemente comprometidos, quienes no pueden adquirir el mismo nivel de protección que otros con las actuales vacunas. “Deben recibir una dosis adicional de una vacuna de ARNm COVID-19, al menos 20 días después de una segunda dosis de cualquiera de las vacunas”.
Las inyecciones de refuerzo se ofrecerán de forma gratuita al igual que las primeras dosis, una vez la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA en inglés) haya terminado una evaluación independiente para determinar la seguridad y eficacia de las mismas.
“La efectividad estimada de la vacuna COVID-19 contra cualquier infección, ya sea sintomática o asintomática, disminuyó del 91% al 66%, una vez que la variante Delta se volvió predominante”, reconoció Layden. “Sin embargo, nuestras investigaciones con trabajadores de primera línea y personal médico, muestran que la vacuna proporciona una fuerte protección”.
De acuerdo a la Dra. Cindy Friedman, jefe de la rama de salud del viajero en la División de Migración Global y Cuarentena de los CDC la advertencia para todos los viajeros es vacunarse independientemente del nivel de riesgo al país al que viajan, aunque es importante consultar las alertas de viaje sobre esos destinos.
“Cualquiera que sea elegible debe vacunarse completamente contra COVID-19 antes de viajar debido a la variante Delta… las personas vacunadas que viajan aún deben tomar precauciones, como enmascaramiento y distanciamiento social”, acotó. Si bien los virus no se propagan fácilmente en los vuelos debido a cómo circula y se filtra el aire en los aviones, los viajes requieren mucho tiempo en las líneas de seguridad y las terminales de los aeropuertos en espacios abarrotados, lo que supone un estrecho contacto con otras personas.
Si alguien está vacunado, no necesita hacerse la prueba antes de viajar ni tampoco entrar en cuarentena. Para entrar a Estados Unidos, si alguien no está vacunado, debe mostrar una prueba COVID negativa tomada máximo tres días antes del viaje. Los expertos recomiendan consultar los requisitos locales para viajeros que quieren visitar varios estados.