Por SUNITA SOHRABJI/EMS Editora colaboradora
Es posible que miles de muertes y casos de COVID-19 en California, Oregón, y Washington entre marzo y diciembre 2020 se puedan atribuir al humo de los incendios forestales, según un nuevo estudio publicado el 13 de agosto por investigadores en la Facultad de Salud Pública T.H. Chan de Harvard.
El estudio, publicado en la revista Science Advances, investigó la conexión entre los datos a nivel de condado y de día a día sobre el material particulado fino – PM 2.5 – y el número de casos y muertes por COVID-19 en 92 condados a través de California, Oregón y Washington. Los investigadores tuvieron en cuenta factores como el tiempo, el tamaño de la población, y patrones sociales de distanciamiento físico y reuniones multitudinarias.
John Balmes, neumólogo de la Universidad de California en San Francisco, explica la correlación entre la exposición al humo de los incendios forestales y la mayor vulnerabilidad a COVID-19. Balmes, que ha estudiado la contaminación atmosférica de California durante más de tres décadas y que ha desempeñado servicios en la Junta de Recursos del Aire de California, dice que las personas de color están en mayor riesgo porque muchos viven en las regiones que padecen constantemente la mala calidad del aire.
El riesgo aumentado relacionado con el humo de los incendios forestales respalda aún más la importancia de las vacunas contra la COVID-19, según Balmes. “Las vacunas están realizando su función”, dijo. Los expertos de la salud pública tienen esperanzas de que la reciente aprobación por la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA, por sus siglas en inglés) de la vacuna Pfizer ofrezca un suave empujón adicional a aquellos que han vacilado en vacunarse.
El profesor de medicina en UCSF es jefe de la División de Medicina ocupacional y ambiental en el Hospital General de San Francisco, y director del Laboratorio de Exposición humana del Centro de Biología pulmonar. Balmes también es profesor de Ciencias de salud ambiental en la Universidad de California en Berkeley, donde es director del Centro de Salud ocupacional y ambiental del Norte de California y el Centro de Seguimiento de salud ambiental pública.
En estas Preguntas Frecuentes, Balmes explica cómo las personas pueden mitigar su exposición al aire contaminado.
EMS: ¿Hay una clara correlación entre la exposición al humo de los incendios forestales y una mayor vulnerabilidad a COVID-19? Haga el favor de explicar cómo ocurre esto.
Dr. Balmes: Las investigaciones sobre el humo de los incendios forestales y COVID-19 son limitadas, pero los resultados de por lo menos dos estudios publicados recientemente demuestran una asociación entre la exposición al material particulado fino (PM2.5) en el humo de los incendios forestales y el riesgo aumentado de COVID-19. El estudio de Harvard también demuestra una asociación entre el humo PM2.5 de los incendios forestales y el riesgo de infección con el nuevo coronavirus.
Hay más estudios publicados sobre la asociación entre el PM2.5 no procedente de incendios forestales y los resultados de COVID-19. Se piensa que el PM2.5 de cualquier fuente de combustible, ya sea humo de tabaco, camiones diesel, o incendios forestales, inhibe la respuesta inmune al virus.
Un mecanismo por el que sucede esto es la sobrecarga de las células en lo profundo de los pulmones que son la primera línea de defensa contra la infección del tracto respiratorio inferior, macrófagos alveolares (AMs), con partículas que son tóxicas a su función. O sea, los AMs están llenos de partículas de humo que inhiben su capacidad de responder correctamente al coronavirus.
EMS: Muchas personas de color viven en regiones que rutinariamente tienen una pobre calidad atmosférica, independientemente de los incendios forestales. ¿Hemos estado en mayor riesgo durante la pandemia?
Dr. Balmes: Sí, las personas de color de bajos ingresos tienen una desproporcionada carga de exposición a la contaminación atmosférica, principalmente debido a las emisiones de diesel de los camiones, de las terminales ferroviarias y de los puertos de California, así como de las centrales eléctricas y fuentes industriales.
Las personas de color también corren mayor riesgo de COVID-19 por otras razones que la mayor exposición a la contaminación atmosférica.
EMS: ¿Se deberían preocupar también las personas completamente vacunadas, dados los números crecientes de infecciones posvacunación?
Dr. Balmes: A pesar de que ocurren las infecciones posvacunación – en una tasa relativamente baja – las vacunas están realizando la función de proteger a la gente vacunada de enfermarse gravemente, incluyendo la hospitalización y muerte.
EMS: ¿Cómo puede la gente mitigar el riesgo a sí misma y a su familia? ¿Qué tipos de mascarillas son particularmente efectivas para filtrar el material particulado? ¿Qué grado de efectividad tienen los purificadores de aire domésticos?
Dr. Balmes: Durante los episodios de la pobre calidad de aire debido al humo de los incendios forestales, las personas deben reducir su exposición quedándose en casa con las ventanas cerradas e intentando limpiar el aire en sus casas.
El aire limpio se puede lograr poniendo un filtro de MERV 13 en un hogar con ventilación central y poniendo el sistema de ventilación a circular de nuevo. En una casa sin ventilación central, se puede limpiar un cuarto con un filtro de aire HEPA portátil – los más baratos que son buenos cuestan entre $160 y $200. Si esto es demasiado caro, se puede fabricar uno en casa colocando un filtro MERV 13, que se puede comprar en cualquier ferretería, sobre un ventilador de caja. Hay videos en YouTube que muestran cómo hacer esto.
Si tiene que salir cuando la calidad de aire es pobre debido al humo de incendios forestales, entonces las máscaras protectoras N95 son las mejores mascarillas a utilizar. Las mascarillas de tela no dan ninguna protección contra el humo PM2.5 de los incendios forestales; las mascarillas quirúrgicas dan menos del 20% de reducción a la exposición; las N95 reducen la exposición en un 80% o más.
EMS: Ha indicado en entrevistas anteriores que este es un tema de justicia ambiental. ¿Cómo pueden los municipios locales mitigar el riesgo para sus residentes?
Dr. Balmes: Los gobiernos pueden proporcionar filtros de aire HEPA portátiles y mascarillas N95 a las comunidades de color de bajos ingresos. También podrían ayudar a impermeabilizar casas para que haya menos penetración de humo PM2.5 de incendios forestales.