Primera encuesta multilingüe de residentes del condado de Los Ángeles, muestra un apoyo contundente a la revitalización del río. Plan Maestro busca invertir $45 mil millones
Una abrumante mayoría de angelinos (91%) apoya los esfuerzos de revitalización de las 51 millas del río Los Ángeles, a pesar de que menos de la mitad de ellos lo han visitado alguna vez. Este es uno de los más importantes hallazgos en una encuesta de opinión pública multilingüe realizada a más de 600 residentes del condado de Los Ángeles en los cuatro idiomas predominantes de sus vecindarios: inglés, español, chino y coreano.
“Cuando empezamos a reimaginar cómo se vería una ciudad post pandémica, el río debería estar en el centro”, dijo Fernando Guerra, director del Centro Thomas y Dorothy Leavey para el Estudio de Los Ángeles en la Universidad Loyola Marymount, que junto al Laboratorio de Estrategias Narrativas Ambientales de la UCLA y Ethnic Media Services, realizaron la encuesta. “Necesitamos estar afuera, necesitamos tener actividades en el espacio urbano, y pensar en un río revitalizado es un gran apoyo para este esfuerzo”, agregó.
Representantes de más de 10 organizaciones gubernamentales y no gubernamentales se reunieron en Los Ángeles para discutir las perspectivas medioambientales y comunitarias del Plan Maestro del condado de Los Ángeles para restaurar el río, así como el significado del apoyo generalizado de todas las razas y etnias a esta iniciativa.
“Para que quienes viven a lo largo del corredor (del río) puedan continuar beneficiándose, hay que abordar varios problemas”, dijo Mark Stanley, director de Conservación de Ríos y Montañas. “¿Cómo se ven los problemas de los campamentos (para personas sin hogar), cómo se ve la vivienda, la integración del espacio abierto, cómo se mira a las comunidades que quieren crear un mayor desarrollo económico, sin crear desplazamiento y gentrificación?”
Los angelinos consideran que la creación de hábitats para plantas y animales y la captura de aguas pluviales para uso futuro antes de que lleguen al océano debería ser una alta prioridad, así como el control de inundaciones, que asegure que los residentes no sean desplazados por el nuevo uso de la tierra.
Para Belen Bernal, directora ejecutiva de Nature for All, quien creció al lado del río junto a su familia, y como alcaldesa de South Gate representó a una comunidad fuertemente afectada por la contaminación, y la falta de espacios para la recreación “es realmente importante mirar la historia y ver qué podemos aprender para reasignar un espacio que es muy necesario para todos”.
La encuesta también encontró que a una gran mayoría de los residentes de todo el condado les gustaría ver más senderos para bicicletas y peatones, parques y puntos de acceso en el río. Un 64% cree que el afluente podría podría convertirse en una atracción de clase mundial, como los ríos en San Antonio, Seúl, y Madrid. Esto es un objetivo viable dado que desde 2010, la Agencia de Protección Ambiental de los Estados Unidos (EPA en inglés) consideró el río Los Ángeles como una vía navegable.
“Lo que ha sido un propósito singular (en revitalización) es desviar el cauce del agua para evitar las inundaciones atmosféricas”, aseguró Sarah Rascon, oficial de equidad ambiental de la Autoridad de Recreación y Conservación de las Montañas. “Pero con este enfoque renovado, nos damos cuenta que se puede hacer mucho más… La calidad del agua se prueba tres veces por semana ahora, hay recreación para todos”, agregó.
Estos nuevos usos están contemplados en un plan maestro de 480 páginas encargado por la junta de supervisores del condado, que busca transformar 32 millas de río revestido de concreto en espacios verdes públicos, y es el resultado de un proceso de divulgación de cinco años tras decenas de reuniones comunitarias. La inversión contemplada por el estado de California es de $45 mil millones.
Aunque solo uno de cada cinco residentes conoce el nuevo Plan Maestro, esto es un número sorprendente para Anthony Rendon, vocero de la asamblea estatal de California, quien cree que los esfuerzos del condado para divulgar el plan, “han dado resultados”.
“También creo que es bueno tener una conversación abierta sobre el desarrollo desigual a lo largo del río” dijo Rendon refiriéndose a los esfuerzos que históricamente se han realizado a lo largo del río superior, y que apenas en los últimos años se concentran en la parte baja. “Quiero agradecer a los residentes de las comunidades de la parte baja del río que se han esforzado por hablar de sus representaciones comunitarias y sus visiones de lo que quieren que el río se parezca”.
Gracias a ese empuje el condado hizo una inversión de $45 millones para crear un Centro Cultural de las Artes en la ciudad de South Gate.
“Los planes maestros pueden ser algo imponentes y ofrecer una visión única de un río que atraviesa todos los vecindarios diversos”, dijo por su parte Max Podemski, director de planeación para Nury Martinez, presidenta del concejo de la ciudad de Los Ángeles, al referirse a los habitantes de las riberas del río que pertenecen en su mayoría a comunidades étnicas de bajos ingresos.
“Esta es una oportunidad para re-imaginar este tipo de infraestructura de un solo uso para beneficios múltiples, en la que estos afluentes pueden revitalizarse de una manera que refleje esas comunidades y se pueda combatir la gentrificación”.
Miguel Luna, presidente de la ONG Urban Semillas, creció cerca del río y dijo que para él y su familia “era nuestra iglesia todos los domingos”. Desde su niñez ha construido una “relación” con el río que “me ha dado tanto”, por lo que cree que el Plan Maestro “tal vez brindará a las personas esa oportunidad de reconectarse, o aprender por qué esa relación es tan importante”.
La conferencia de prensa fue moderada por Jon Christensen del centro de innovación Luskin de la Universidad de California en Los Ángeles (UCLA) y contó con la participación de otros interesados como Damon Nagami, abogado sénior del Consejo de Defensa de los Recursos Naturales, Rudy Ortega, Jr., presidente de la tribu, Fernando Tataviam Band of Mission Indians, quien dedicó una canción al histórico río.